Devuelven a su sitio la Ginger Bread, una gigante galleta de jengibre robada
La Ginger Bread, una enorme galleta de jengibre hecha de poliespan que formaba parte de la decoración de la tienda Tifanny and Cake, ha sido devuelta misteriosamente a su lugar original. La decoración, que mide dos metros de altura, desapareció en la madrugada del sábado pasado y los propietarios del establecimiento quedaron desconcertados sin saber quién se la había llevado. Sin embargo, al encontrarla de vuelta, junto a ella había una carta escrita a mano que hablaba en nombre del adorno. En la nota, se podía leer: «Ya sé cuál es mi sitio; he vuelto para quedarme. Feliz Navidad».
El adorno fue sustraído mientras el dueño de la tienda estaba ausente. Había dejado la Ginger Bread a la puerta del establecimiento, para que la gente pudiera admirarla. Al regresar, se encontró con la desagradable sorpresa de que ya no estaba, a pesar de que estaba atornillada al suelo. Nina Voztolomei, colaboradora del establecimiento, mencionó que decidieron no dejarla expuesta durante toda la noche por miedo a que fuera robada, pero los ladrones fueron más rápidos. No solo se llevaron la decoración, sino que también se llevaron los tornillos.
La galleta de jengibre, bastante ligera pero incómoda de transportar, ha regresado a su sitio, pero aún es un misterio quién la tomó y quién la devolvió. Los propietarios del establecimiento se encuentran desconcertados por la situación, pero al menos están contentos de tener de vuelta su adorno navideño tan querido.
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