La justicia desestima la denuncia de la familia del pescador fallecido en el naufragio del Nuevo Rafael
La Audiencia Provincial de Málaga ha desestimado el recurso de apelación presentado por la familia del pescador Mohamed El Moaimouni, quien perdió la vida en el naufragio del barco Nuevo Rafael en julio de 2020. Aunque el patrón y dos tripulantes sobrevivieron al hundimiento, el cuerpo de Mohamed nunca fue recuperado.
En base a un informe del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, se concluyó que el naufragio fue causado por diversas circunstancias desfavorables, como el mar de aleta y el momento escorante generado por los cables de arrastre. La embarcación contaba con los permisos y autorizaciones necesarios, así como con los equipos de seguridad adecuados.
La Audiencia Provincial considera que no hay pruebas suficientes para imputar al patrón del barco los delitos de homicidio imprudente y contra los derechos de los trabajadores. Además, la indeterminación de las causas del accidente impide atribuir responsabilidad al patrón. Por tanto, se ratifica el sobreseimiento decretado previamente por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vélez-Málaga.
La familia de Mohamed, que ha realizado manifestaciones en busca de apoyo para recuperar el cuerpo del fallecido, no ha logrado reunir los fondos necesarios para utilizar robots submarinos en la búsqueda. Aunque perciben pensiones estatales de viudedad y orfandad, nunca han podido encontrar el cierre necesario para este trágico incidente.
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